Anabella volverá

Anabella volverá
con la luz de un nuevo Sol
regresarán los dos.
Anabella caminará
del horizonte al portal
y yo la abrazaré.
Anabella reirá
como lo solía hacer
hasta caer lágrimas
hasta que el viento no sople más.
Anabella me verás
esperando aquí por ti
y regresarás al Sol.

Se fue buscando una nueva piel
eran cosas del amor
locuras entre dos.
Se fue abrasando un amanecer
con los ojos rojos de amor.

Anabella trepará
el cielo junto con el Sol
y entre las ramas del junco
sus cabellos yo veré.
Anabella volverá
entre la sangre y el metal
se despegará del suelo
y antes de volar
Anabella volverás
y te daré mi ultimo adiós
mi pequeña princesa.

Se fue buscando una nueva piel
eran cosas del amor
locuras entre dos.
Se fue abrasando un amanecer
con los ojos rojos de amor.

Podría volar
podrías matarme
mientras vos me regalás el sol
nacen flores en multicolor
mientras se destapa la imaginación
yo creo en vos

Estrella de mar

Me dormí a la sombra del Sol
y desperté en un bosque del mar.
Yo nadé entre miles de algas
entre corales, payasos y manta rayas.
Desde el fondo algo dorado se acerca
una sirena bañada en oros del Sol.

Y vi sus ojos más hermosos que el cristal
la sirena vuela con aletas hechas de mariposas.

Me llevó hasta un lago de césped
rodeado de flores silvestres
Coloridos pájaros submarinos
entran en mi espalda y se vuelven alas.

Y volé siguiendo a la estrella del mar
la sirena vuela con aletas hechas de mariposas.

Entramos en la profundidad
y perdí su rastro en la oscuridad.
Y una voz inmensa exploto en llamas
su canto ilumino el fondo del mar.

Y vi cosas que jamás podría explicar
la voz de una estrella canta su poema de mar y rosas



En el mar no hay suelo, en el mar solo es cielo.
En el mar no existe el tiempo

Fantasmas

Te secás tus ojos rojos
y apretás bien las muelas
pensando en Dios.
O quizás pensás en ella
o en aquella puerta abierta
que se cerró.

Y subís las escaleras
mientras las paredes tiemblan
junto con vos.
En el borde de la niebla
rodeado de aves negras
explotás.

Los cuervos se entreveran
lastiman tu espalda
gritás.
Vuelven los fantasmas
malditas lágrimas
de sal.

Lo mirás a los ojos
y gritás su nombre al viento,
ya no temblás.
Y a un paso del abismo
no sos nada ni estás vivo
y saltás.

Y el viento las secó
llevo las lágrimas
al mar.
Entre las baldosas
desaparecerás
aaaah

Todo lo que te espanto,
ya no queda nada más
no hay más.
Y hoy nadie te mató
hoy mataste a tu dolor
al saltar.